martes, 10 de abril de 2018

RECETAS ANTIESTRÉS - GUACAMOLE CON ALGA WAKAME - KETO PORRIDGE - TRUFAS DE COCO Y CLOROFILA

SHOWCOOKING - RECETAS ANTIESTRÉS PATROCINADO POR EL GRANERO PLUS
IMPARTIDO POR VANESSA LOSADA - 22/2/18


GUACAMOLE CON ATILLOS DE CHIPS DE ALGA WAKAME

GUACAMOLE
• 1 aguacate pequeño pelado y troceado
• 1 cs de cebolleta picada
• Zumo de 1/2 limón
• 1 cs de aceite de oliva
• 2 cp de KALE de El Granero Integral
• 2 cs de cilantro
• 1/2 cp de sal
• Pimienta
CHIPS DE ALGA WAKAME
• 8 Tiras de alga wakame cortadas en tiras
de 2cm x 12cm aprox.
• 2 hojas de alga nori cortadas en tiras de
2 cm x 5 cm aprox.
• 2 zanahorias peladas y cortadas en tiras
gruesas de 0,5 cm x 12 cm aprox.
• Aceite de oliva
• Pimienta molida



KETO PORRIDGE

TOSTADOS
• 1 cs de aceite de coco
• 1 cs de almendras troceadas
• 3 cs láminas coco tostadas
• Cilantro para presentar
MOJADOS
• 1/4 v bebida vegetal (almendras)
• 1/4 v bebida de coco
• 2 cs de tahini
• 1/2 cs de mantequillad de coco
• 1 cs de chía
• 1 cp de lino molido
• 2 cp de ANTIOX de El granero integral
• 1 cp de INMUNOX de El granero integral
TOPPINGS
• Polen
• Mitad de la mezcla tostada



TRUFAS DE COCO Y CLOROFILA
10 TRUFAS
• 8 orejones
• 2 cs de bebida de avena
• 1/2 cp de PSYLLIUM de El granero
integral
• 1/2 cp de VERDES de El granero integral
• 1 cs de mantequilla de coco derretida
• 3 cs de anacardos molidos
• 5 cs de coco rallado molido
• Coco rallado molido para rebozar

lunes, 9 de abril de 2018

ALIMENTACIÓN EN PRIMAVERA. CARACTER Y EMOCIONES


Buscar fuera lo que está dentro es una tendencia humana sobre la que ya nos orienta el Tao Te King cuando dice: “Sin salir de la puerta, se conoce el mundo. Sin mirar por la ventana, se ve el camino del cielo. Cuanto más lejos se va, menos se aprende”. Observo actualmente una inclinación generalizada a la terapéutica externa, a regular las emociones desde el exterior. La toma de consciencia, el conocimiento psicológico de sus mecanismos, el dejarse sentir, acogerlas, agradecerlas, practicar la contemplación, el baile y la expresión corporal, hacer ejercicio, etc. han sido ,y siguen siendo, un componente importante de la ecuación hacia la conquista de la emociones.

Deseo mostrar la otra cara de la moneda, la cara biológica y fisiológica del mundo emocional.

Las emociones están estrechamente vinculadas con la estructura y la función de nuestros órganos, con la cantidad y calidad de energía que reciben y con el patrón de vibración que sostienen en el tiempo. En mi opinión, las afecciones emocionales tienen su causa en la siguiente proporción: 80% causas biológicas y fisiológicas, 20% causas vitales y experienciales.

Desde la Medicina Tradicional China el concepto de órgano se aborda desde su función, y no queda circunscrito a una estructura anatómica si no que se consideran también otras partes del cuerpo que mantienen relaciones específicas con un órgano determinado. Desde un punto de vista complementario de la ciencia occidental y oriental entendemos que si algunas estructuras orgánicas de nuestro cuerpo están sensiblemente dañadas, los órganos en cuestión, tendrán una funcionalidad alterada, tal desequilibrio estructural y funcional se puede manifestar en nuestra vida en forma de pensamientos, sensaciones y emociones desagradables: angustia, ansiedad, miedos, irritación, agresividad, abatimiento, confusión, suspicacia, desorden, inconstancia, falta de voluntad, rigidez mental, etc.

De la misma forma, si la cantidad de energía que recibe un órgano es excesiva o insuficiente, o contiene una calidad tóxica, dicho órgano va a funcionar con un importante desajuste, lo cual se mostrará como un estado psicológico y emocional alterado. Finalmente, si el patrón vibracional que sostiene un órgano tiene que ser permanentemente reajustado, desde unos valores muy diferentes a los que el órgano requeriría, también nuestras emociones estarán en constante reajuste, lo que conlleva con el tiempo, a mantener estados patológicos asociados, por ejemplo, a la psicosis bipolar.

Cuando estos desequilibrios son constantemente alimentados por estilos de vida ampliamente desconectados de la naturaleza, nuestro sistema se expresa mediante un estado psicológico, un carácter, una forma de ser y unas emociones poco armónicas.

A menudo consideramos que el carácter que tenemos es inherente a nuestra constitución, naturaleza o genética, es decir, que ‘somos así’. Pero lo cierto es que puede ser consecuencia de una estructura, función, energía, o vibración en mal estado de alguno o varios de nuestros órganos principales: riñón, hígado, corazón, estómago e intestinos. Es muy importante, por lo tanto, comprender que gran parte de los problemas psíquicos y emocionales tienen su fundamento en el decaimiento de nuestras estructuras y nuestra condición orgánica, ya sea por desgaste, intoxicación, pobre circulación, hábitos alimentarios, hábitos vitales, etc.

Para mejorar la condición de nuestro organismo se recomienda principalmente adecuar nuestras pautas alimentarias tratando de seleccionar, en cada momento, los alimentos y preparaciones óptimas para cada uno de nosotros.

En el caso del hígado, órgano asociado al actual momento del año (primavera, movimiento Madera), podemos decir que, según su histología, tiene funciones como la secreción endocrina, la producción de la bilis, el almacenamiento y modificación de sangre, vitaminas u hormonas y que es un centro de detoxificación de primer orden. En relación a su comprensión bioenergética su función es la de regular el flujo de la energía por todos los rincones del organismo. El buen estado de su estructura y de su función se manifiesta en un carácter y estilo personal flexible, adaptable y comprensivo.

Cuando el hígado está bloqueado y la energía no puede fluir adecuadamente por el organismo manifestamos rigidez mental, crítica, impaciencia, ira, agresividad. Las causas de este desajuste fisioenergético las encontramos en el consumo excesivo de grasas saturadas, sal refinada, frutos secos, lácteos y otros alimentos contractivos. El consumo de alcohol, azúcar y especias. El consumo habitual de productos secos, salazones, fritos y sofritos. La exposición a tóxicos ambientales, pesticidas o fármacos. La propensión a la contención emocional. La vivencia repetida de situaciones frustrantes que no nos gustan. El exceso de luz directa en los ojos por el abuso de pantallas de ordenador, teléfonos móviles, etc.

Entre los síntomas más comunes de este bloqueo de hígado están la incomodidad interna y emocional. La respiración entrecortada, superficial y no fluida. El frío y rigidez en las extremidades. La rigidez mental y emocional. Las crisis personales y laborales. La irritabilidad y agresividad. Las adicciones. La depresión, etc.

Las recomendaciones alimentarias para este desequilibrio incluirían: Tomar cereales integrales bien cocinados. Frutas liofilizadas y rehidratadas. Verduras de hoja verde. Germinados. Pequeñas cantidades de fruta roja o manzana. Alimentos cocinados al vapor, salteados sin tapa, plancha y caldos.


Pablo Martín Rivera
Consultor de Macrobiótica en La Biotika www.labiotika.es

jueves, 5 de abril de 2018

FERMENTADOS: NUTRICIÓN SIMBIÓTICA PARA EL EQUILIBRIO INTESTINAL Y DE TODO TU ORGANISMO



Desde la antigüedad la medicina tradicional, como la china, la ayurveda o la hipocrática han considerado unos intestinos sanos como fuente de salud y longevidad. En la cultura japonesa la zona del bajo vientre a unos cinco centímetros por debajo del ombligo, denominada Tanden o “mar de Ki”, simboliza el centro de gravedad y equilibrio de la persona. Asimismo en la antigua Grecia Hipócrates de Cos, padre de la medicina en occidente, ya advertía hace más de 2400 años que “toda enfermedad comienza en los intestinos”. A continuación veremos qué hay de cierto en todo esto y que rol juega la Nutrición Simbiótica, y en especial los alimentos fermentados, en nuestra salud.

El concepto “simbiótico” apunta a la relación de apoyo mutuo existente entre el ser humano y los más de cien mil billones de microorganismos que lo habitan, es decir, ¡hasta 10 veces más de microbios que células humanas! La Nutrición Simbiótica propone construir una relación solidaria con estos microorganismos a través de una alimentación integral y consciente.

Este tipo de alimentación permite tomar conciencia del “conjunto” para nutrirnos adecuadamente, dedicando especial atención a los microorganismos beneficiosos que forman parte de nuestra microbiota o flora intestinal, muchos de ellos compañeros de viaje desde hace millones de años. 

Numerosas investigaciones en el campo de la ciencia han demostrado que los intestinos junto a la flora intestinal hacen mucho más que participar en la digestión de los alimentos, estando directamente relacionados con otras muchas funciones que afectan al resto del organismo como son la modulación nerviosa, la respuesta inmunológica y la actividad metabólica. Y es que unos intestinos debilitados y una flora intestinal desequilibrada están implicados en muchas de las dolencias que experimenta actualmente la sociedad moderna como desórdenes nerviosos, enfermedades autoinmunes, infecciones, alergias, problemas digestivos, intolerancias alimentarias, deficiencias nutricionales y obesidad. 

Dado que, a grandes rasgos, las dos funciones principales de los intestinos son constituir la calidad de nuestra sangre a través de la absorción de los nutrientes de los alimentos digeridos y evacuar la materia fecal no aprovechable resultado de la digestión, podemos hacernos a la idea de cuán importante es mantenerlos en buenas condiciones para proveer satisfactoriamente a nuestras células de energía y evitar llevar un monto de “basura” acumulado en nuestras entrañas. Además la pared intestinal supone una barrera entre el medio externo (luz intestinal) y el interno (fluidos vitales y órganos), por lo que su debilitamiento puede permitir el acceso de sustancias no deseadas hacia la sangre.

Asimismo existen multitud de especies bacterianas asociadas a una flora intestinal sana que viven con nosotros desde que nacemos en una relación de simbiosis y beneficio mutuo, en la que cuidan de nuestra salud poniendo “orden” en nuestros intestinos a cambio de “techo y comida”.

Con nuestros hábitos, especialmente con la alimentación, influimos directamente en el tipo de microorganismos que van a formar parte de nuestra flora intestinal. A modo ilustrativo podemos distinguir entre “dos bandos principales”, el primero presidido por bacterias fermentativas que degradan y se alimentan de la fibra presente en los vegetales, y el segundo por bacterias putrefactivas implicadas en los procesos de descomposición de la carne y las proteínas. 

Las primeras, en especial las bacterias acido lácticas, promueven un entorno intestinal favorable, estando implicadas en la producción de sustancias beneficiosas como ácido láctico, ácido butírico, vitaminas del grupo B y K, enzimas digestivas, y bacteriocinas. Este tipo de bacterias junto a otros microorganismos regenerativos se encuentran de forma natural asociados a los vegetales. Y es precisamente cuando fermentamos los vegetales que se produce el gran milagro de la vida: ¡las bacterias acido lácticas se multiplican por miles de millones! dando lugar a un alimento vivo, que se conserva en su propio jugo y con más nutrientes que recién cogido del huerto. 

En contraposición las bacterias putrefactivas, aunque necesarias en su justa medida, son las responsables de olores desagradables y de la producción de sustancias tóxicas e irritantes para nuestro organismo como amoniaco, cadaverina y putrescina, así como de impedir el aprovechamiento de algunos nutrientes esenciales. Este tipo de microorganismos se encuentran naturalmente en cadáveres de animales muertos y en los intestinos de animales carnívoros y carroñeros. El consumo de proteína animal contribuye a su proliferación en nuestros intestinos. 
La Nutrición Simbiótica apuesta por una dieta variada rica en fibra y fitonutrientes presentes en los alimentos integrales de origen vegetal. Estos van a favorecer tanto el metabolismo celular como el crecimiento de bacterias simbióticas fermentativas, las cuales mantienen un entorno intestinal saludable e impiden el sobrecrecimiento de microorganismos patógenos y pre-patógenos asociados a procesos inflamatorios y de putrefacción intestinal.

Los alimentos fermentados son el alimento simbiótico por excelencia, predisponen un “terreno” biológico regenerativo y mejoran la ecología del cuerpo:

  • Aportan microorganismos regeneradores de la mucosa y la flora intestinal
  • Proporcionan enzimas digestivas y micronutrientes biodisponibles como vitaminas del grupo B y K
  • Son fáciles de digerir y favorecen la digestión del resto de los alimentos
  • Favorecen la asimilación de nutrientes esenciales
  • Estimulan la motilidad intestinal y combaten el estreñimiento
  • Favorecen el metabolismo celular
  • Contribuyen a la eliminación de toxinas y deshechos acumulados
  • Dificultan la proliferación de flora putrefactiva y microorganismos patógenos
  • Fortalecen nuestro sistema inmunológico
  • Fomentan nuestro bienestar psicoemocional

Cuidar nuestra alimentación e incluir alimentos fermentados vivos (sin pasteurizar ni cocinar) habitualmente en nuestra dieta contribuye en gran medida a mantenernos sanos.  Cultiva Vida, cosecha Salud.

Mario Sánchez Écija – Naturópata
Colaborador Cursos de Fermentados en Aula de Estudios de La Biotika
labiotika.es

miércoles, 4 de abril de 2018

QUÉ ES Y COMO ACTÚA LA REFLEXOLOGÍA PODAL EN TU CUERPO



Desde hace más de 4.500 años, muchas de las antiguas culturas como la hindú, china, egipcia e inca han recurrido a la estimulación de distintas zonas de  los pies para tratar sus dolencias y mejorar su salud. Posteriormente esta práctica se ha ido  perfeccionado gracias a la labor de algunos practicantes de la medicina y las terapias naturales como: William Fitzgerald, Edwin F. Bowers, Joe Shelby Riley, Eunice Dakota Ingham, Mildred Carter, Doreeen E. Bayly y Hanne Mardquadt. Otras figuras como Frederic Viñas e Isabel Pérez Broncano, entre otras, han promovido y contribuido notablemente a su práctica y difusión en España.

Actualmente la Reflexología Podal ocupa un insigne lugar dentro de la terapéutica naturista y somos muchos los profesionales que la incorporamos en nuestros tratamientos.

¿QUÉ ES LA REFLEXOLOGÍA PODAL?

La Reflexología Podal es una terapia manual y holística cuya finalidad es favorecer la Salud-Equilibrio gracias a la estimulación refleja que experimentan los diferentes órganos y partes del cuerpo cuando es ejercida una presión sobre determinadas áreas de los pies. Y es que en cada pie tenemos más de 7.200 terminaciones nerviosas y 6 de los 12 meridianos principales, estos últimos objeto de estudio y tratamiento en Medicina Tradicional Oriental.

Esta terapia actúa a través del cuerpo físico y asimismo influye sobre los aspectos inmateriales propios del ser humano, como la actividad mental, las emociones y el flujo de Ki o Energía Vital. Aunque existen mapas topográficos de las correlaciones de los pies y las diferentes partes del cuerpo, en los pies aparece reflejada la persona en todo su conjunto, estos es, que además del ámbito orgánico se pueden observar rasgos psicoemocionales y energéticos que la caracterizan.

¿CUÁLES SON LOS MECANISMOS DE ACCIÓN DE LA REFLEXOLOGÍA PODAL?

Sistema Nervioso
Mediante la digitopresión ejercida durante el tratamiento en áreas concretas de los pies se estimulan receptores sensitivos. Las señales nerviosas producidas por dicha estimulación viajan hasta la médula espinal donde se efectúa una interacción neuronal, dando lugar a una señal nerviosa eferente que viaja hacia otras partes del cuerpo correlacionadas (tejido conectivo, órganos, glándulas y vísceras) con las áreas de presión, generando finalmente una respuesta refleja.

Por otro lado la activación de la rama parasimpática asociada al nervio vago o décimo par craneal durante el tratamiento posibilita un profundo estado de reposo, fundamental para la regeneración de los tejidos y normalización de algunas funciones corporales como la frecuencia cardíaca, el ritmo respiratorio, la trasmisión nerviosa, las secreciones glandulares, la actividad visceral, la digestión  y la actividad metabólica.

Sistema Músculo Esquelético
La regulación de la actividad nerviosa, la producción de neurotransmisores y los desbloqueos sobre los meridianos energéticos y puntos de presión efectuados durante el tratamiento son tres mecanismos por los cuales el paciente puede experimentar una notable disminución del dolor y de la tensión acumulada (estrangulación de nervios, contracción muscular mantenida y rigidez articular).

Sistema Endocrino y Metabolismo
La activación de la rama parasimpática y del nervio vago así como la acción refleja sobre los diversos órganos endocrinos y células secretoras propicia la regulación hormonal de forma natural. De esta manera se favorece tanto la secreción como la inhibición de hormonas a través del sistema de retroalimentación o biofeedback. Debido a la estrecha relación que mantiene el Sistema Nervioso y el Sistema Endocrino sería apropiado hablar de un Sistema Neuro-Endocrino, donde señales nerviosas y químicas (hormonas) interaccionan contribuyendo al equilibrio general del organismo.

Sistema Cardiocirculatorio y Linfático
Es habitual la reducción de la frecuencia cardíaca gracias a la activación parasimpática. Además se activa la circulación sanguínea y linfática a nivel local y general durante el masaje promoviendo, junto con la respiración, una mayor oxigenación celular.

Sistema Energético
La estimulación de los diferentes tsubos (puntos) y meridianos (canales) mediante la digitopuntura practicada en Reflexología Podal permite desbloquear y regular el flujo de Ki o Energía vital.

BENEFICIOS DE UN TRATAMIENTO CON REFLEXOLOGÍA

La Reflexología Podal al ser una terapia refleja y holística tiene la característica principal de trabajar a nivel sistémico, propiciando en la persona receptora del tratamiento la Vis Medicatrix Naturae, concepto naturista para denominar a la capacidad curativa del propio organismo para restablecer el equilibrio.

Algunos de los efectos beneficiosos que podemos experimentar al recibir un tratamiento son:
  • Estado profundo de relajación y bienestar.
  • Reducción del estrés físico y mental.
  • Liberación psico-somato-emocional en forma de palabras, llanto, risa, etc.
  • Mejora del estado de ánimo.
  • Disminución del dolor local y general.
  • Mejora del equilibrio y la propiocepción.
  • Mejora de la circulación sanguínea y linfática.
  • Regulación hormonal.
  • Normalización de las funciones digestivas y de eliminación.
  • Eliminación de sustancias de desecho y residuos del metabolismo celular a través del aire exhalado, el sudor, la orina y las heces.
  • Modulación del sistema inmunológico, aumentando o adaptando su respuesta.
  • Disminución de la fatiga.
  • Incremento de energía y vitalidad.
En resumen, la Reflexología Podal resulta de gran utilidad tanto para la prevención y el tratamiento de los diferentes desequilibrios de la salud como para reducir el estrés y mejorar nuestra calidad de vida. 

Los pies nos acompañan desde nuestro primer paso hasta el último… Independientemente de las dificultades que se presenten por el camino ellos están hay procurándonos estabilidad y libertad de movimiento. En ellos se refleja nuestras andaduras por la vida… Nuestra personalidad y estilo de vida. “Los pies son un libro abierto para quienes saben interpretarlos… Y de su lectura podemos aprender mucho de nosotr@s mismos y de l@s demás”

El domingo 6 de mayo comenzamos el PRIMER MÓDULO de formación en Reflexología Podal Holística. SI HACÉIS LA RESERVA ANTES DEL 27 DE ABRIL TENÉIS UN DESCUENTO DE 20€ SOBRE EL PRECIO INICIAL
http://labiotika.es/doc/aula_de_estudios_reflexologia.html

Mario Sánchez Écija – Naturópata
Colaborador Cursos de Reflexología Podal en Aula de Estudios de La Biotika
labiotika.es